Ir al contenido principal

ABRIL/APRIL 1998 Jueves/Thursday 9 TEMA/SUBJECT Nulle part / Por Eliseo Verón


Releyendo lo que había escrito, se sintió invadido por cierta incomodidad. Había demasiados cabos sueltos y cosas que no cerraban.
Registró a título de inventario que se había liberado aparentemente de la culpa de su antiperonismo de los años cincuenta, pero no se entendía cómo, ni cuándo, ni por qué. Intuía que este borramiento de la culpa tenía que ver quizá con dos cosas: su alejamiento progresivo del marxismo y su relación con "la cultura". El viejo texto sobre la Reforma y el movimiento estudiantil tenía un tono categórico, transmitía certidumbre y destilaba al mismo tiempo la amargura de pertenecer a esa "juventud pequeñoburguesa" que parecía haberse equivocado siempre. (Tenía además la sensación confusa de que, en ese texto, pequeño era más infamante que la burguesa). 
El texto de 1988 era mucho más "académico"; a pesar de su tonalidad subjetiva, era la escritura, pensó, de alguien instalado. ¿Pero instalado dónde? ¿En el centro del triángulo París, Nueva York, Buenos Aires? Es decir: nulle part, nowhere.
Le pasó por la cabeza una hipótesis abominable: el marxismo le sirvió para cortar sus raíces católico-pequeñoburguesas. No pudo peronizarse por razones político-culturales (que ya no existían en los años setenta, lo cual explica la camporización de muchos de sus amigos "burgueses"). Y cuando el marxismo dejó de tener para él resonancias conceptuales, sencillamente, solo. Anclao en París
Como siempre, lo salvó una mujer: la semiología. 

(Publicado en "Efectos de Agenda" 1° edición, Barcelona, España, 1999, Pág.55).

Comentarios

Entradas populares de este blog

GRACIAS

Quiero agradecer a quiénes, a su manera, siempre estuvieron. Es justo y necesario agradecer a Maestros, colegas, compañeras y compañeros que a lo largo de toda mi vida profesional abrieron con generosidad oportunidades y aprendizajes en distintos ámbitos. Sólo puedo decir: Gracias. Quiero agradecer especialmente a las instituciones universitarias que a diario promueven proyectos de investigación, públicos y abiertos. A la Universidad Nacional de las Artes, a la Universidad Nacional de Rosario y a la Universidad de Buenos Aires. A los profesores y profesoras que me devolvieron en estos años el sentido de seguir adelante. Infinito agradecimiento. Concebir de modo lineal la educación tal vez hoy lo siento un error: en otro momento de la vida encontrar la palabra adecuada puede guiarnos a tiempo. Gracias de corazón O.T.  Gracias a mis familiares y amigos que siempre estuvieron cerca, incluso a pesar de las diferencias. Espero compartir algunos materiales preliminares que he realizado, ...

Hans Belting: Imagen y culto. Una historia de la imagen anterior a la era del arte (1990)

La primera teología de la imagen  Juan Damsceno (muerto ca. 750) Tres discursos sobre los iconoclastas y Exposición de la fe cristiana El gran teólogo procedía de una familia de cristianos árabes e ingresó hacia el año 700 en el monasterio de San Sabas, en las cercanías de Jerusalén. Allí redactó en torno al 730 los "tes discursos contra aquellos que denostaban las imágenes". El primero está dedicado al patriarca de Jerusalén, y el segundo lo escribió con el fin de hacer más comprensible la materia del primero. Los ataques contra el emperador ponen de manifiesto que la polémica sólo era posible fuera de las fronteras del Imperio. Los argumentos se sustentan con numerosas citas de los Padres de la Iglesia, para poner en juego del peso de la tradición. En el capítulo 89, que contiene la "Exposición de la fe ortodoxa" , se resume brevemente la doctrina sobre las imágenes. En Occidente, los escritos de Juan Damasceno no se divulgaron hasta las traducciones ...

Eliseo Verón: "Semiosis de lo Ideológico y del Poder" (1984)

“Es necesario entonces transformar el objeto empírico del punto de partida (el o los textos) por medio de una investigación que se oriente al orden de la discursividad. Definamos dicho orden de la discursividad al menos por la negativa: no hay que tratar los textos como si consistieran en series (necesariamente lineales) de enunciados, obtenidos por “normalización” del corpus (obtenidos, en otras palabras, por destrucción de lo discursivo). Desde este punto de vista, el orden de lo discursivo remite a dos cuestiones importantes. La primera concierne a lo que he llamado la materialidad del sentido . En efecto, la discursividad es un proceso de espaciotemporalización de la materia lingüística: exhibición espacial y puesta en secuencia temporal, inextricablemente ligadas una a la otra. Contrariamente a la opinión de Saussure, el orden del discurso no es lineal . La segunda cuestión concierne al hecho de que, si está interesado en el estudio del sentido socialmente producido de conjunt...